SOBREVIVE EN SOLEDAD (relato)
Pensar que con veintiún años tuve que haber vivido todo lo que viví en aquella guerra. Corría el año 1982, en pleno gobierno militar, un gobierno que cada vez iba perdiendo mas fuerza, tanto por las denuncias de desaparecidos, como por el gran problema económico que tenía. La ultima salvación de ese gobierno, era tratar de recuperar las islas del atlántico sur, las islas Malvinas, el presidente por ese momento, pensó que ganando esa guerra, nadie ya los iba a sacar de su poder, por supuesto es que no pensó todos los problemas que esto iba atraer, todo lo que iba a pasar y que iba hacer una guerra absurda. Unos mese atrás, me tocaba entrar en el sorteo para hacer la colimba, era sabido que no lo quería hacer, en ese momento jugaban con la suerte de uno, como si jugaran a la ruleta, si te toca negro entrabas si te toca rojo no entrabas, por mala suerte me toco el negro. Mi familia estaba muy preocupada, a mi madre no le gustaba para nada la idea de que haga la colimba, mi padre era medio facho, y pensaba que hacer la colimba era de machos, pero por mas macho que seas a nadie le hubiese gustado haber ido a una guerra, mi madre para calmarme me decía que me quede tranquilo que era nada mas que un año que iba a pasar rápido, ojala hubiese sido nada mas que un año, mi madre al decirme eso no pensó en que a los pocos meses de que me había tocado hacer la colimba, el gobierno militar de turno en esa época, se le iba a ocurrir organizar una guerra. Unos días antes del comienzo de la guerra, en la plaza de mayo, una multitud de personas se movilizaron hacia la plaza como apoyando al gobierno por aquella iniciativa tomada, y pensar que aquel que dio el discurso tenia unas cuantas copitas de mas. El pueblo estaba muy contento con el hecho de volver a recupera las islas, por su puesto que como en todo los años del gobierno militar, trataron de tapar todo lo que estaba mal, con una frase que ya quedo en la historia “estamos ganando”, todo el pueblo se puso muy contento, mi familia se había puesto muy feliz pensando que tenían a un hijo héroe, el pueblo estaba tan entusiasmado, que cuando se empezaban a pedir cosas que se necesitaban como, alimentos, abrigos, aparte de eso las mujeres daban sus alhajas, cosas de mucho valor, tanto comercial como personal, por supuesto que nada de todo eso nos llegó. Esa famosa frase fue nada más que un dicho, una de las tantas mentiras de aquel gobierno, una frase que no tenía nada que ver con la realidad, cuando llegamos a las islas estábamos totalmente desprotegidos, en ese lugar hacia demasiado frió, no teníamos nada como para abrigarnos, no teníamos nada caliente como para tomar, la comida era muy escasa, en el momento de enfrentar a esta guerra estábamos muy asustados , nuestras armas eran muy viejas, en cambio el poder ingles, que en ese momento ocupaba las islas, estaba muy bien equipado, con armas de ultimo modelo, la mayoría funcionaban, en el único lugar donde se podía dar un poco mas de batalla era por el mar, aunque tampoco se pudo hacer mucho. Ver a muchos compañeros caer como si fueran animales que iba hacer carneados, hacia muy mal a uno, intentar dormir un poco, pensando que te podían bombardear, pensar en no volver a despertar mas, pensar que nunca mas ibas a ver a tu familia, pensar a quien estoy defendiendo, si a mi patria o a un si vergüenza que un día se levanto y pensó en hacer una guerra, pensar que hay personas cerca mío que están perdiendo la vida, que están perdiendo a una familia, pensar que hay madres que están perdiendo a sus hijos, porque había chicos mas chico que yo, que igual a mi nunca habían agarrado un arma, todo eso me ponía a pensar en aquellas noches interminables, pensando que mañana iba a estar de nuevo en mi casa con mi familia. El final de la guerra se veía venir, se iba perdiendo muchos hombres, los inglese estaban tomando posesión de casi todos los lugares. El gobierno militar seguía esperando la ayuda del país norteamericano, ayuda que nunca llego, y que si apoyo a los británicos. En junio de ese mismo año se termina con la guerra, los sobrevivientes de aquel desastre que dejó miles de muertos, volvimos a nuestras casa, pero quedaron muchas familias que perdieron a sus seres queridos. El gobierno como era sabido, perdió el poco poder que ya tenia y un año después el gobierno militar deja el poder, dejando que vuelva a triunfar la democracia. Hoy muchos de los sobrevivientes de aquella guerra, cobramos un sueldo mínimo que nos brinda el estado, que por supuesto no nos alcanza para nada, nos dejaron totalmente desprotegidos psicológicamente, hoy tenemos que salir a pelearle a la vida todos los días como aquel otoño de 1982.
Escrito por Braian seyfarth